500 g de harina
12 g de levadura fresca
120 ml de leche
150 g de azúcar
2 huevos
100 g de mantequilla
Cubierta
2 huevos
6 cdas. de leche
120 g de coco rallado
2 cdas. de azúcar
500 g de harina
12 g de levadura fresca
120 ml de leche
150 g de azúcar
2 huevos
100 g de mantequilla
Cubierta
2 huevos
6 cdas. de leche
120 g de coco rallado
2 cdas. de azúcar
500 g de harina
12 g de levadura fresca
120 ml de leche
150 g de azúcar
2 huevos
100 g de mantequilla
Cubierta
2 huevos
6 cdas. de leche
120 g de coco rallado
2 cdas. de azúcar
Para la masa, colocar la harina en un bol y hacer un hueco en el centro. Aparte, disolver la levadura en la leche junto con el azúcar. Verter la levadura disuelta y los huevos dentro del hueco de harina y comenzar a amasar poco a poco, hasta obtener un bollo liso.
Disponer la masa en una mesa apenas enharinada y agregar la mantequilla a temperatura ambiente. Amasar bien hasta obtener un bollo liso y tierno. Cubrir con un paño limpio y dejar leudar hasta que duplique su tamaño.
Una vez que la masa leudó, amasar para desgasificar y dividirla en 12 porciones del mismo tamaño. Formar bollos y disponer en una placa apenas engrasada, dejando suficiente espacio entre sí. Reservar en un lugar cálido hasta que dupliquen su tamaño.
Batir apenas uno de los huevos y pincelar la superficie de cada bollo. En un bol, mezclar el otro huevo con la leche, el coco rallado y el azúcar. Repartir esta mezcla en partes iguales sobre cada uno de los bollos. Hornear a 200° C durante 30 minutos o hasta que estén dorados.